“Herida de bala sobre parillo costal izquierda, sin orificio de salida”. Esa fue la descripción en el certificado de defunción que elaboró la médica veterinaria que asistió el viernes por la mañana a una casa del barrio privado Puerto Roldán y constató la muerte de un perro raza border collie.

La situación causó conmoción en el country: “Vivimos con un asesino de perros y no sabemos quién puede ser”, manifestó uno de los vecinos en diálogo con El Roldanense, quien se mostró visiblemente consternado por la noticia y contó que este domingo hay planeada una reunión en el barrio para debatir al respecto.

“Es un horror, estamos en shock”, agregó esta persona quien pidió reserva de identidad. “Tenemos miedo, hay un loco suelto y no sabemos quién es”, se excusó.

Es que al ser un barrio cerrado, las chances de que el responsable del disparo sea alguien externo se reducen al mínimo. A eso hay que agregarle que el tiro se habría producido de madrugada, acorde a lo que describen testigos que manifestaron escuchar dos tiros cerca de las 00.

Según consta en la denuncia que fue radicada por el dueño del animal en la Comisaría Sexta, el can fue encontrado sin vida por un empleado del barrio, a 100 metros de la finca donde vivía.