La última semana fue intensa, tanto para los Bomberos Voluntarios de Roldán como los de la zona. Se repitieron los incendios de pastizales en diferentes zonas de la ciudad y en localidades aledañas, en circunstancias que convocan un actuar coordinado entre las dotaciones de la región. En muchos casos, el fuego llega a extenderse hasta cerca de las viviendas.

“De lunes a lunes, asistimos a ocho incendios. Cinco fueron en nuestra localidad, en tanto que prestamos asistencia para otros tres en Funes”, describió Uriel Bruera, en representación del cuartel local, a El Roldanense. Por caso, el incendio registrado durante la noche del lunes en un sector de fábrica de ladrillos ubicado en el límite entre Funes e Ibarlucea requirió un trabajo de horas y el consumo de más de 100.000 litros de agua.

Uno de los motivos por los que el fuego se desata con mayor facilidad en esta época es la ausencia de precipitaciones, aunque existen casos intencionales. “Los incendios suceden por la sequía. Hace desde abril que no llueve considerablemente en la región”, expuso Uriel, aunque agregó: “Los de calle Avellaneda, camino al basural, seguro que fueron intencionales. Hubo incendio de basura y esto llevó a que se propague el fuego por el campo”.

“Siempre suceden cosas así en épocas de sequía. Igualmente, este año se incrementaron los incendios. Tenemos un promedio de uno por día”, contó Bruera. En el mismo orden, el portal Info Funes publicó que vecinos del basural de la ciudad vecina realizaron denuncias de quemas intencionales en el lugar, y una de ellas fue llevada a la Cámara de Diputados. Según el relato de la gente que vive en las cercanías, cada viernes se prende fuego la basura acumulada para disminuir la cantidad y que así haya más espacio.