La Ciudad

Un globo por un dibujo: la original propuesta de la Escuela Especial en su cumple 44

En el frente del instituto ya se pueden ver los mensajes de la gente. Planean hacer una plaza verde en su interior y pintar la escuela, aunque en paralelo las actividades son limitadas por la actualidad.

Cada persona que pasa por el frente de la Escuela Especial en estos días puede hacer un intercambio, el de un dibujo o mensaje por un globo. Es la forma de celebrar junto a la comunidad que adoptó la institución, que cumple 44 años en este mes de agosto. Poco tiempo atrás, con motivo del día de la Bandera, la movida había sido la misma, con un mensaje por una pequeña insignia nacional. A día de hoy, en el frente ya se pueden ver pegados los dibujos de los visitantes.

Así, la escuela se apega a la ciudad en los tiempos actuales. Se trata de tareas que se realizan en conjunto entre ambos turnos, ya sea de jóvenes y adolescentes por la mañana como de los más pequeños por las tardes. También, ante la imposibilidad de realizar tés bingos, peñas o ferias como se hacía antaño. “Estas ideas siempre parten de la comunicación entre los chicos y los docentes. Después, se llevan a cabo en el grupo y se van exponiendo”, dijo Claudia, directora, a El Roldanense.

Puertas adentro y más allá de que la realidad se vea limitada, en la escuela siempre analizan proyectos e iniciativas. “Una de ellas es el armado de una plaza verde en el interior de la escuela. Es todo más local, ya que no se puede organizar algo y lo que se hace debe ser al aire libre”, describió. “También planeamos aprovechar nuestra huerta y plantar en la parte vertical y horizontal, o arbustos para decorar las paredes. Ahí también va a participar la familia, todo muy acotado y manteniendo la distancia. Es lo que estamos programando”.

Claudia dice que hay proyectos que quedaron truncos, como uno de natación, y que no pueden pensar en grande por las restricciones que impone el coronavirus. Día a día, se rigen por las medidas que impone el Ministerio de Educación, por eso es que los pensamientos van a corto plazo. “No tenemos grandes ideas de realizar algo distinto, nos sentimos limitados y no podemos hacer eventos para recaudar dinero. Eso nos tiene atrapados. Necesitamos conseguir material didáctico, queremos pintar la escuela, y todo se ve muy restringido”, explicó.

En paralelo, no deja pasar la oportunidad de agradecer a toda la comunidad que cotidianamente brinda su apoyo a la escuela. Junto a personal directivo, docentes y alumnos, se encuentran preparando souvenires para llevar a otras instalaciones y poner de manifiesto el aniversario. “Nos vemos acotados, por eso intentamos contar nuestros proyectos a quienes siempre colaboraron con la escuela. A ver si nos pueden ayudar con algo, por ejemplo si la comunidad nos puede donar pintura para concretar nuestro propósito. O alguien que nos subsidie para comprarlas”, expuso Claudia.

Actualmente, volvió la presencialidad y la escuela sigue funcionando, aunque nunca cerró sus puertas y siempre se mantuvo en contacto con las familias. “La escuela especial es una modalidad que atraviesa a toda la población. Acompañamos toda la trayectoria de los adolescentes, niños y jóvenes. Tratamos de que sus derechos sean respetados, en igualdad de oportunidades, en cuanto a asistir a las escuelas y tener el acompañamiento necesario, para que puedan transitar estos espacios. Tenemos esa función muy loable dentro de la educación especial”, relató la directora.

En diversas ocasiones, las integraciones de los chicos no se hacen en su totalidad en la escuela especial, sino que pueden intercalarse con otros espacios culturales. “Hacemos ver lo importante que es la inclusión. La integración es una herramienta y la inclusión significa mucho más, es ver al otro que también existe, que es parte de la comunidad y ver sus capacidades, no sus limitaciones.  La educación especial es la oportunidad que tienen muchos de ser vistos, que existimos y somos tan iguales como cualquiera”, reflexionó Claudia.