“Aparentemente ya pasó lo peor y, si todo sigue así, en unas horas se descomprime la situación”, confió el secretario de Gobierno municipal Eduardo Bufarini al ser consultado por El Roldanense sobre el operativo llevado adelante para amortiguar las consecuencias del fuerte temporal que azotó a la ciudad y toda la región desde la madrugada.

Según los registros oficiales, sobre Roldán cayeron 120 milímetros de lluvia y se debieron activar las cinco bombas desagotadoras con que cuenta la administración local, las cuales se fueron ubicando en el transcurso de la mañana en puntos estratégicos: tres sobre calle Larrea (en las intersecciones de Echagüe, Buenos Aires y la Ruta), una cuarta en la colectora de la Ruta A012 en el camino paralelo al barrio Santa Teresa, y otra en Ruta 9 y el canal Carlos Gardel.

“No hubo gente evacuada. Personal municipal trasladó a algunos vecinos de Villa Flores hacia casas de familiares, pero sólo por precaución”, agregó el funcionario. Es que si bien hubo calles anegadas en diversos barrios de la ciudad, muchas de las cuales todavía permanecían cubiertas de agua tras varias horas, ese sector fue el más perjudicado.

En tanto, desde la Secretaría de Promoción Humana y Comunitaria se debió darle forma a un operativo de asistencia a afectados y se trasladaron bolsas de arena para frenar la embestida del efluente pluvial.