La Ciudad

Cadena de favores: Omar ya tiene una parte de las chapas para reparar su carpintería

Sus dos talleres, herencia de su padre, se vieron seriamente afectados por el granizo. Con silobolsas y lonas, y la ayuda de amigos, consiguió cubrir el techo como paliativo. Una empresa de Rosario se puso la 10, igual todavía falta. Cómo ayudar.

Pasadas las 17 horas del último domingo, Omar Depascuale escuchó un ruido violento y seco que lo sorprendió. Minutos antes, había mirado el cielo oscuro y comprobó que se avecinaba la tormenta, pero nunca imaginó el temporal que se desató instantes después. Miró hacia el patio por la ventana de su casa, vio la fuerza de las piedras golpeando la pileta y supo que no era el momento de acercarse al taller contiguo, donde trabaja como carpintero diariamente. Sabía que se encontraría con una situación caótica, algo que recién pudo evidenciar cuando la tormenta mermó su furia.

“Vi los chorros de agua arriba de las máquinas, por todos lados. Lo primero a lo que atiné fue a cortar la electricidad, más allá de que ya no había luz”, cuenta Omar a El Roldanense, y señala que intentó proteger su trabajo. “Agarré todo el laburo que tenía para entregar, que eran puertas placas y puertas macizas, y llevé a lo de mi mamá, que vive al lado. Después de secar todo, empezamos a sacar agua y a tapar las máquinas por si volvía a llover”, relata. Aún no pudo probar si las máquinas funcionan correctamente, por la humedad de los motores y porque prefiere no tentar a la corriente. “Seguramente, alguna se habrá jodido u oxidado, pero es todo recuperable. Por suerte, nadie se lastimó, que es lo más importante”.

La carpintería es una herencia de su padre, un legado al que le dio continuidad. “Esto lo hizo mi viejo, el galpón debe tener 50 años. Él empezó en Rosario, viajaba en tren y trabajaba en Fortuna Muebles, una fábrica que todavía existe. Viajó por muchos años, hasta que la empresa le ofreció realizar placares acá en Roldán”, rememora mientras recorre con la vista cada agujero que dejó la pedrada. “Levantó los dos galpones y trabajó acá durante 40 años, hasta que falleció hace un tiempo”, amplía.

El dueño de casa sale de un taller e ingresa al otro. Cada agujero es del mismo tamaño de las piedras que azotaron a la ciudad. Sin embargo, por una cadena de favores, Depascuale ya se puso manos a la obra y convocó a unos amigos que, desinteresadamente, pusieron el hombro. “Un muchacho que tiene campo en San Jerónimo me donó una silobolsa completa y nueva de 20 metros de largo por ocho de ancho. Esta mañana la fuimos a buscar”, cuenta. “Después, vino un amigo con su familia de Arroyo Seco para ayudar, y me trajo cuatro lonas grandes de camiones”, completa.

De cualquier manera, la ayuda se hizo mayor y una empresa rosarina donará una parte menor de las chapas para que pueda empezar a cambiar las dañadas. De hecho, todas ellas han sufrido golpes. “Un amigo es dueño de Comercial Ram de Rosario y me contó que me va a donar unas chapas. El muchacho me dijo ‘tienen pequeñas fallitas y no las podemos vender, pero a vos te van a servir’. Y no es que me las dejó a mejor precio, me las donó”, expresa. Junto a las donaciones, su ahijado armó una cuenta de Mercado Pago mediante la cual se puede ayudar a través de diferentes sumas de dinero. Según los cálculos que realizó, necesitará más de medio millón de pesos para la reparación total, y ya cuenta con la predisposición de amigos que lo ayudarán a techar.

A Omar y su familia los define la palabra resiliencia. Una vida dedicada a la carpintería, como la suya, no conoce de obstáculos. “Siempre le digo a mi hijo que hay que formar parte de la cadena de favores, un día le toca a una persona y al otro te puede tocar a vos”, señala la esposa de Omar. “Yo laburo solo, y el laburo de carpintero es muy complejo. Hay mucha mano de obra, se requiere mucho tiempo. Todo se hace con sacrificio y lo hago para vivir. Lo que signifique una ayuda es bienvenido”, señala él, como corolario.

Lo que falta

Si bien la ayuda recibida fue importante, a Omar todavía le falta mucho para poder poner de pie nuevamente su carpintería. Entre esas cosas se cuentan los tirantes para clavadores, tornillos, así como la reparación de máquinas.

Para seguir colaborando, dejamos a continuación los links:

Ayuda x 1 https://mpago.la/2PuzRmQ

Ayuda x 2 https://mpago.la/24qvmZr

Ayuda x 3 https://mpago.la/2B8GncS

Ayuda x 4 https://mpago.la/2HH1xHr