La Ciudad

El joven abogado que lleva más de 300 fallos a favor con terrenos escriturados en Tierra de Sueños

En los pasillos de Tribunales, Nicolás Parisi es conocido como “el abogado de TDS” a sus 27 años. Producto de la gran cantidad de fallos positivos, amplió notoriamente su cartera de clientes.

Corría el mes de enero de 2020 cuando el abogado Nicolás Parisi, por entonces de 24 años, comenzó a estudiar el caso de los terrenos en litigio del barrio Tierra de Sueños 3. Analizó los pormenores, cada detalle, aunque nunca imaginó que aquello sobre lo que trabajaba se convertiría en ese caso gigante con el que soñó cuando aún estudiaba. Hoy en día, tras casi tres años de trabajo, lleva más de 300 sentencias firmes con lotes escriturados, casi un centenar próximo a salir con resolución a favor y otros tantos que siguen ingresando.

“Como es de público conocimiento, Aldic había sido inhibida por la Municipalidad y la gente no podía escriturar. El mismo día que cayó la inhibición, se generó un revuelo en el barrio”, recordó Parisi en diálogo con El Roldanense y agregó: “Durante los primeros 20 días, hubo mucho asesoramiento, nadie se animaba a ser el chivo expiatorio de todo esto”, contó.

Con el paso de los días, logró convencer a una familia para avanzar e ir a fondo. Al cabo de tres meses pudo ganar el primer juicio, lo que significó un punto de inflexión para lo que seguiría. “Fue muy complicado, dado que del otro lado tenes cuestiones políticas y una multinacional. Después de un largo tiempo, pudimos tener una sentencia favorable”, relató. Si en un principio nadie se animaba a dar el primer paso, luego del suceso alcanzado fueron más las familias que se atrevieron.

Parisi rememoró los días en que los dueños de terrenos inhibidos llegaban a su estudio, pedían hablar con el Doctor y se quedaban sorprendidos cuando veían su juventud. “Muchas veces pensas ‘ojalá me toque este caso gigante alguna vez en mi carrera’. Soy un afortunado de la vida, un bendecido por Dios, dado que nunca me lo esperé a mi corta edad”, aseguró. “Costó un poco ganarse la confianza de las personas. Logré hacerlo con un trabajo claro y transparente. A día de hoy, estas familias me siguen recomendando, y entonces se hizo una bola”, afirmó.

En los pasillos de Tribunales, es conocido como “el abogado de Tierra de Sueños” más que por su apellido, según expresó. “Es fantástico ir caminando y que se te acerquen para preguntar ‘che, Doc, ¿todo bien con los de TDS?’”, profundizó. Incluso, el resultado favorable de su trabajo y la experiencia adquirida en poco tiempo hizo que abogados de renombre lo consulten para sus casos, o le deriven otros. “Lo ves como algo totalmente fuera de lo común, cosas que uno sueña y se van haciendo realidad”, puntualizó.

“Cuando tomé el primer caso sobre TDS, lo hice con una sensación enorme de desafío. Nunca pensé en lo que podía pasar más allá. Me centré exclusivamente en ese cliente y lo demás vino solo”, narró Parisi. A medida que pasó el tiempo, organizó reuniones en el barrio a las que acudían los vecinos que querían sacarse dudas o hacerle determinadas consultas. “Todo fue creciendo y, obviamente, cuando ves que vienen 30, 40, ves la beta. Es un caso que pude ganar de principio a fin. No tengo dudas de que cualquier otro que ingrese lo voy a ganar, porque tengo las herramientas jurídicas para hacerlo”, señaló.

El caso de TDS fue una puerta que se abrió y una oportunidad que tomó para ampliar su cartera de clientes. Y si bien actualmente trabaja casi full time en este asunto, eso no significa que descarte otros. “Estoy abocado a darle una atención personalizada 100% a cada familia, esa es mi intención. El cliente vive el expediente conmigo. ¿De qué manera? Cada vez que te necesito, voy a buscarte. Así, el cliente ve la transparencia del caso, y yo le voy contando todo. No hay dudas de absolutamente nada, aunque esto lleva mucho tiempo”, destacó.

Especializado en lo civil y comercial, estudió también la carrera de martillero público y corredor inmobiliario, y es docente en la UCA y en un colegio secundario. “Lo hago por vocación, no por la parte económica. Amo la docencia y enseñar”, describió. En paralelo, sigue trabajando en torno a las inhibiciones que le llegan desde Tierra de Sueños. “Lo que quiero no es solo ganar los juicios, sino también la confianza del cliente”, detalló sobre sus formas. Mientras, los casos se siguen acumulando en su despacho.

Podés contactar a Nicolás al celular: 3416 63-9427