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Alejo Gutiérrez, de las inferiores a la primera de Roldán Rugby: “Fue una locura”

El pibe de las inferiores del club que hizo su presentación en el equipo dice que sintió alegría y ansiedad. Se ilusiona con que la ciudad se contagie de la pasión por este deporte.

Uno de los grandes objetivos de Roldán Rugby es armar un equipo que sea íntegramente local y, en esa búsqueda, la vuelta a la competencia trajo una gran novedad. El equipo jugó oficialmente tras más de un año e hizo su presentación Alejo Gutiérrez, el primer joven de las divisiones inferiores que debuta en primera. “Haber jugado con la primera fue una locura. Sentí alegría y ansiedad. Le dedico mucho tiempo a esto y esperaba desde el año pasado estar en el plantel”, dice a El Roldanense.

Empezó a entrenar a los 9 años, ingresó al club a los 17 y hoy, a los 20, es parte del equipo principal. “Fueron tres años entrenando con juveniles, terminaba el entrenamiento y me quedaba con los del plantel superior a entrenar. Me gusta mucho y mi familia me acompaña desde el principio en todo”, expresa. Sus inicios habían sido en Rosario, pero en su momento ya no pudo viajar y dejó por un tiempo.

Alejo juega en tercera línea, de octavo. “El rugby representa mucho, los valores, la amistad, la buena onda, el compañerismo. Me llevo muy bien con todos”, manifiesta. El equipo se está formando de a poco, pero la meta es “tener un gran nivel entre todos”. “Lleva tiempo pero estamos todos muy metidos en esto que nos gusta”, asegura el rugbier que se ilusiona con seguir evolucionando: “Me pasan muchas cosas por la cabeza, pero por ahora estoy enfocado en mejorar física y mentalmente y aprender mucho más”.

De cara al futuro, piensa que la ciudad se puede contagiar de la pasión por este deporte. “Una de las cosas que he pensado mucho es que Roldán puede sentir este deporte como yo. En poco tiempo se formó bastante el club y cada vez va a ir mejor, queremos que Roldán sea rugby”, argumenta con entusiasmo. Además, asegura que van a llegar más pibes a primera, porque “hay muy buena base de chicos que están jugando en juveniles”.

El joven que acaba de debutar alterna los entrenamientos con su trabajo. “Laburo en plomería con uno de mis tíos desde ya hace varios años. Trabajo y entreno los tiempos justos, por ahí se complica pero trato de estar siempre”. Su camino recién arranca, pero ya sueña en grande y espera que Roldán Rugby siga creciendo.