La Ciudad

Vieron que había tela para cortar y amaron un proyecto de ropa con talles 100% reales

Dos amigas cumplieron el sueño de tener su propia marca de ropa y el proyecto creció tanto que hoy llegan con sus envíos a distintas provincias del país.

Mariana Chaves y Sandra Sanchez son dos amigas a las que la pandemia las agarró con ganas de emprender un proyecto juntas. Los maridos de ambas vieron perjudicados sus trabajos cuando comenzó la cuarentena y decidieron que era el momento justo para apostar a un negocio que les permitiera generar e ingresos y cumplir su sueño.

Gracias a las telas que fueron consiguiendo y a una antigua máquina de coser, se lanzaron de lleno con Enamórame Enamórame, su marca de ropa para cuerpos reales. Con diseños originales, la idea de ambas siempre fue que las prendas abarcaran talles grandes, que van desde un número 38 hasta un talle 70, con propuestas juveniles y frescas para ofrecer a sus clientas opciones 100% a la moda.

“Con Sandra nos conocimos hace seis años en unas vacaciones y a partir de ahí nos hicimos amigas. Yo vivía con mi marido en Paraná, pero tomamos la decisión de venir a Roldán juntos con nuestros hijos y ahí empezó nuestra fantasía de poder concretar el proyecto”, señaló Mariana.

Las emprendedoras comenzaron a diagramarlo en marzo y se lanzaron formalmente al mercado en mayo con diferentes prendas de vestir. Actualmente están diseñando prendas como vestidos cortos y largos, remeras y babuchas, con diferentes estampados y telas que se expanden como el modal y el morley.

Según Mariana, una diferencia de su ropa es que hacen pocas prendas iguales ya que su objetivo es ofrecer variedad y hacer que las clientas sientan que están usando diseños exclusivos y únicos. Aunque hoy en día la pandemia limitó la oferta de telas, las amigas también se las arreglan combinando distintas gamas de colores en la ropa que crean.

“En mi caso yo soy una aficionada, me encanta la ropa. Sandra si estudió diseño y además es profesional del área de estética así que también sabe mucho. Ambas hacemos todo lo referido a diseño y moldería y después tenemos una amiga que es la que nos corta las telas y nos termina de confecciona la vestimenta”, destacó Mariana.

La marca de las emprendedoras cosechó gran cantidad de clientas, no solo en Roldán, sino también en localidades de alrededores e incluso en otras provincias como San Luis, Mendoza y Neuquén. Los envíos los hacen a través de Correo Argentino y Vía cargo y de algunos repartos se encargan ellas mismas, llevándolos hasta la casa de la persona.

Teniendo en cuenta el contexto que no deja a las mujeres probarse la ropa, Sandra y Mariana aceptan devoluciones de prendas. En caso de que esto suceda, se encargan de hacer todo el proceso de desinfección antes de volver a tenerla en stock.

“Nos tomamos todo esto muy enserio, para nosotras es importante y es nuestra manera de aportar un granito a nuestro hogar. El día de mañana aspiramos a poder abrir nuestro propio negocio en Roldán”, destacó la emprendedora.