La Ciudad

Allanamientos en Roldán para dar con los cómplices de la banda de Esteban Alvarado

Los operativos se realizaron en la ciudad y también en Rosario y Funes. Entre los detenidos hay dos altos jefes policiales y un abogado y no se descartan más detenciones.

Foto: La Capital Foto: La Capital

El operativo que culminó con cinco detenidos, entre ellos tres altos jefes policiales y un abogado, como integrantes de la asociación ilícita que comandaba Esteban Lindor Alvarado, incluyó 20 allanamientos que se realizaron en Rosario, Funes y Roldán -no se precisaron direcciones-, de los que participaron 150 efectivos de la Tropa de Operaciones Especiales (TOE) y de la Policía de Acción Táctica (PAT).

La serie de allanamientos, que fue ordenada por los fiscales Matías Edery y Luis Schiappa Pietra, a cargo del Organismo de Investigaciones, se inició a las 5.30 de este jueves, y se prolongó durante varias, con el objetivo de apresar una decena de personas que se sospecha integran la organización criminal liderada por Alvarado.

Uno de los domicilios allanados esta mañana fue la casa donde viven los padres del abogado Claudio Tavella, en Freyre al 1200. El letrado, quien estaba en el lugar en forma circunstancial, es el representante legal histórico de Alvarado y, según trascendió, había sido librada una orden de arresto en su contra, que se concretó a media mañana.

Alrededor de las 9.30, Tavella fue retirado de la vivienda con las manos esposadas y la cabeza cubierta con suerte rojo. Tenía zapatillas, una remera negra y bermudas con vivos rojo, blanco y lila. Fue trasladado por personal policial al lugar donde se dispuso su detención, que no fue revelado.

En un breve contacto con la prensa, el jefe de la TOE, Maximiliano Bertolotti, dio detalles del operativo ordenado por la Fiscalía y confirmó que se habían hecho cinco detenciones y se secuestraron cinco armas de fuego, teléfonos celulares y documentación de interés para la causa.

«Se trata de una investigación que tiene que ver con la banda de Esteban Alvarado. Los detenidos son Jorge Venegas, tres empleados policiales con cargo jerárquico, y el abogado Claudio Tavella. Uno de los arrestados podría ser uno de los testaferros de Alvarado», añadió Bertolotti.

El funcionario policial reveló que, entre los policías detenidos, están Gustavo Spoletti, exjefe de Drogas Peligrosas y que actualmente trabajaba en San Lorenzo, y el excomisario Luis Quevertoque, quien integró la Brigada Operativa de la División Judiciales, que tuvo a su cargo la etapa inicial de la investigación de la banda Los Monos.

«Esta es una investigación larga, que comenzó con la detención de Esteban Alvarado y con el secuestro del teléfono celular. Podría haber más detenciones. Las órdenes que firmaron las fiscales las recibimos anoche y las ejecutamos de las 5.30. Trabajó personal de la Tropa de Operaciones Especiales y de la Policía de Acción Táctica», añadió Bertolotti.

Una de las primeras personas que llegó a la casa de los padres del abogado detenido fue el hermano del profesional, Hernán Tavella. «Estamos sorprendidos. Somos una familia normal. No estamos acostumbrados a todo esto», comentó al arribar al lugar, en declaraciones a La Ocho.

Alvarado fue imputado el pasado junio como jefe de una asociación ilícita que, entre otros delitos, habría instigado las balaceras contra edificios del Poder Judicial y el crimen del prestamista Lucio Maldonado, cuyo cadáver fue hallado el 13 de noviembre del año pasado en la zona de Circunvalación y bulevar Oroño.

En la audiencia también fueron imputados dos exjefe de la Policía de Investigaciones (PDI) y dos efectivos que revestían tareas en la repartición, acusados de integrar la banda que lideraba Alvarado. También quedó implicado Marcelo O., quien fue señalado como “colaborador esencial” para que se perpetre el ataque a la vivienda de una funcionaria judicial.

La Fiscalía le achacó a Alvarado liderar una asociación ilícita entre agosto de 2018 y abril de 2019 dedicada a cometer delitos y dotar de impunidad a la banda. A los restantes imputados los imputó por haber proveído armas y vehículos a la banda, contactar y pagarle a los autores de hechos ilícitos ordenados por el jefe de la organización criminal.

Fuente: La Capital