Este lunes por la tarde los seis ediles mantendrán la última reunión de Comisión para analizar uno de los tres temas que el cuerpo deliberativo local se propuso aprobar este año: la nueva ordenanza que regula la actividad de las remiserías en la ciudad.

El encuentro –que se desarrolla ya por fuera del período ordinario de actividad- será el segundo del año que mantendrán con dueños de remiserías locales en los cuales analizan la ordenanza que en noviembre del años pasado ingresó el Ejecutivo luego de que la anterior –presentada en 2016- perdiera estado parlamentario.

Esta dilación de tantos años es la que lleva a los ediles a proponerse sacar la nueva reglamentación este año, algo similar a lo que ocurre con la de aplicación de fitosanitarios y la de pirotecnia cero.

“Juntos a los remiseros estamos leyendo el proyecto, escuchamos críticas y propuestas. Ya tuvimos una reunión donde analizamos medio proyecto y ahora vamos con la segunda parte. Después seguramente habrá una tercera reunión donde vamos a comunicar la decisión que tomó el cuerpo. La idea es que salga por unanimidad”, señaló a El Roldanense el concejal Roberto Amsler.

Con el aumento de la población que experimentó Roldán en los últimos años y la imperante necesidad de trabajo, en los últimos años desde el municipio evaluaron que aumentó marcadamente el pedido de licencias de remises, una chapa que se otorga a quienes cumplan con los requisitos de la ordenanza vigente.

Es por eso que la intención del Ejecutivo es poder contar con la nueva herramienta cuanto antes. “Una de las reformas es incorporar el reloj, también se prevé el control de tarifas y otros requisitos que junto con concejales oficialistas y con Comercio se estuvieron trabajando”, habían anticipado desde el municipio el año pasado cuando la norma ingresó al cuerpo.

Otra de las nuevas reglamentaciones sería que los coches tengan GPS.