La primera infancia de nivel privada empieza a padecer los coletazos de la pandemia. Por el avance en el país del Covid-19, muchos padres incumplieron con los pagos de las cuotas correspondientes a los meses de marzo y abril y la recaudación de los jardines de infantes de la ciudad se redujo hasta un 70 %.

Maria Eugenia Hag, es la propietaria del jardín Barquito de Papel y en diálogo con El Roldanense, destacó: “Debido al aislamiento social obligatorio, al cual respetamos y entendemos porque primero esta la cuestión de la salud, no podemos trabajar y se nos hace muy difícil sostener los puestos de trabajo y pagar los alquileres”.

“Todos los jardines de la ciudad cerramos un viernes, pensando que iba a ser por un corto tiempo, y todavía seguimos sin actividad. Son cinco jardines que estamos totalmente paralizados: Corazón de Melón, Barquito de Papel, Duende, Planeta Verde y Cebollita”, sostuvó Hag.

“Nosotros nos mantenemos con el cobro de las cuotas de los papás y mamás y el promedio en esta cuarentena que se está cobrando es de un 30% y con eso no nos alcanza ni para pagar los sueldos”, explicó María Eugenia y añadió: “No hay que abordar la temática como un enfrentamiento, sino de una forma colaborativa. No debe romperse la alianza jardín-familia. Por eso les pedimos a los padres que estén en condiciones de abonar que por favor lo hagan.Cuanto más sean, los jardines tendremos más mecanismo de ayuda”.

En la Argentina, el nivel inicial es el más privatizado del sistema educativo. Uno de cada tres niños concurre a una guardería o jardín maternal privado según datos del Observatorio Argentinos por la Educación.

Por último, Maria Eugenia Hag, detalló: “Estamos en contacto con los jardines de toda la provincia que están con la misma problemática, es muy desesperante el momento que estamos viviendo y no queremos que se pierda el trabajo que realizamos durante tantos años”.