Remiseros piden implementación del taxímetro y que se termine con los coches truchos
Choferes locales demandan igualdad de condiciones. Denuncian que en Roldán hay “muchísimos vehículos” sin habilitación.
Remiseros que llevan adelante su trabajo en la ciudad solicitaron al Concejo que se avance con un proyecto para instrumentar precios por taxímetro y también que se proceda con los controles necesarios para terminar con el funcionamiento de “muchísimos” coches que “no cuentan con la habilitación necesaria”.
En una nota ingresada ayer en el cuerpo legislativo local, unos veinte choferes recuerdan que “en 2015 el Municipio abrió la concesión de chapas, brindando accesibilidad para el otorgamiento de las mismas y la regularización de los vehículos. Presentando la documentación solicitada, el otorgamiento era inmediato”.
“Sin embargo –prosigue el documento– actualmente muchísimos vehículos continúan trabajando como remis en la ciudad y no cuentan con la habilitación necesaria, poniéndonos en desigualdad con este grupo, puesto que todos los firmantes poseemos nuestros vehículos en regla y presentamos mensualmente la documentación requerida para poder continuar con la habilitación vigente, así mismo abonamos todos los conceptos que se requieren para poder trabajar en regla, como el seguro, DREI o Monotributo”.
La nota presentada por los remiseros también hace referencia a la necesidad de que avance con la puesta en marcha del taxímetro como herramienta para fijar el precio de los viajes. Un proyecto que va en esa dirección fue impulsado el año pasado en el Concejo por el bloque del Frente Para la Victoria (FPV), pero hasta el momento no llegó a buen puerto.
En diálogo con El Roldanense, desde la agencia Remiss 0480 Roldán explicaron que la importancia del reloj no sólo pasa por brindar la posibilidad de avanzar con cuadros tarifarios que sean iguales para todos los prestadores del servicio, sino también para establecer una relación más clara con el pasajero y evitar discusiones respecto al monto a pagar.
En la actualidad, las remiserías locales fijan el valor de los viajes sin que exista un marco de regulación al respecto. Los coches habilitados suelen manejar precios similares entre sí, pero –según apuntan los propios choferes– los vehículos en situación irregular, al tener menores costos, proponen competencia desleal.