Los dos roldanenses que se le animaron al medio Ironman
Es una de las disciplinas más exigentes del mundo. Hubo 800 participantes, de los cuales muchos abandonaron por las duras condiciones climáticas.
Guillermo Bianchi y Silvia Güemes se conocieron entrenando y este domingo fueron protagonistas del mismo sueño: correr la distancia Half Triatlon, una competencia del estilo medio Ironman que se desarrolló en Concordia. Fueron 7 kilómetros de carrera, 90 en bici y luego otros 21 más corriendo. Si bien el primer tramo debió haberse hecho nadando, las pésimas condiciones climáticas hicieron que Prefectura prohíba la salida a aguas abiertas de los participantes, por lo cual se modificaron los planes.
“Yo venía de un problema en los ligamentos del pie que casi me impedía correr los últimos meses, por eso lo venía reemplazando con bicicleta y nado. Y justo me sacaron la natación”, contó Bianchi en diálogo con El Roldanense. Lejos de significar esto un obstáculo insuperable, el atleta local decidió no mirar hacia atrás y tener sólo la meta entre ceja y ceja.
Ni Guillermo ni Silvia se dedican por completo al deporte sino que ambos tienen sus profesiones que nada tienen que ver con el ejercicio físico. Sin embrago, cada día logran hacerse un hueco entre el trabajo, la familia y las demás obligaciones para entrenar de cara a los desafíos que se van planteando. Primero fueron distancias más cortas, luego olímpicas, incluso maratones, y este Half Concordia era un objetivo que se habían planteado hace más de dos años.
Quizás fue esa energía extra que le pusieron a cada entrenamiento la que hizo que, pese a que el clima los recibió con tormenta muy fuerte, no claudiquen en su desafío. De hecho, de los 800 competidores anotados, hubo muchos que no se presentaron y otros tantos fueron los que abandonaron antes de completar la carrera. No fue el caso de Guillermo y Silvia, claro.
Incluso, Silvia logró llegar en quinta en su categoría y recibir un premio por ello, algo que hasta el momento nunca un atleta local había conseguido. Por su parte, Guillermo realizó el recorrido en seis horas y 15 minutos, un tiempo que lo colocó en el pelotón del medio al llegar a la meta. De todas formas, sostiene: “Mi meta es llegar y pasarla bien. Sólo eso”.
“En septiembre me puse esto como objetivo pero ya venía con una base de entrenamiento. Todo depende de la dedicación y del tiempo. Mentalmente tenés que ser muy positivo. En la carrera del otro día muchos ni siquiera largaron porque tenían miedo de caerse en la bici, por ejemplo, debido a las condiciones climáticas”, relató Bianchi.
“Soy muy positivo. Entrené mucho para el tiempo disponible que tengo. Igual, en esto depende mucho el apoyo de tu familia. Cuando llegás ahí a la largada pensás en ser fuerte, porque hiciste el sacrificio anterior y en cumplir el sueño. Sino no lo soñás, no lo podes hacer”, describe por último el deportista roldanense y pone en sus palabras también las de Silvia.