Una agente de Guardia Urbana de Roldán que el fin de semana intervino ante la denuncia de un caballo suelto perdió un dedo de su mano cuando trasladaba al equino, que se asustó y tiró de un cable con el que estaba amarrado. Fue en inmediaciones de la Ruta 9.

El desgraciado hecho fue confirmado a El Roldanense por el Juez de Faltas local, Roberto Bufarini, quien contó que la oficial de la GUR debió ser atendida en el Samco y luego trasladada al Sanatorio Mapaci de Rosario.

El magistrado contó que el caballo se asustó mientras era trasladado, tiró intempestivamente de un cable y “le cortó una falange” a la agente.

Ante la persistente problemática de los caballos sueltos, el Tribunal de Faltas consiguió un terreno en la zona del cementerio para su secuestro. Bufarini indicó que ahora los animales serán llevados allí y que sus dueños sólo podrán retirarlos acreditando propiedad, además de abonando la multa que pudiera correr.

En caso que en determinado tiempo nadie reclame la titularidad de los equinos secuestrados, los mismos serán puestos a disposición de la División Pumas / Guardia Rural de la Policía de Santa Fe.