El Frente Progresista propone la adhesión del Concejo a los actos por el Día Internacional de la Mujer
La declaración de la concejala socialista Maira Leiva convoca además a seguir bregando por la igualdad de derechos de las mujeres y diversidades
La concejala Socialista del Frente Progresista, Maira Leiva, ingresó al cuerpo legislativo de la ciudad una declaración de adhesión a los actos del Día Internacional de la Mujer en la ciudad. “Desde el Frente Progresista Cívico y Social hemos luchado siempre por los derechos de la mujer y las diversidades”, comentó Maira Leiva.
En sentido sumó: “A lo largo de la historia las mujeres hemos llevado adelante una larga lucha para conseguir igualdad, ser respetadas y tratadas en iguales condiciones”.
El proyecto consiste en acompañar e intentar dar más visibilidad a la desigualdad existente, de esta manera generar más conciencia, justicia e incentivar la participación de las más jóvenes a este tipo de movilizaciones. Convocar a seguir bregando por la igualdad de posibilidades y de derechos para todas las mujeres y diversidades.
Un poco de historia
Esta fecha fue institucionalizada por las Naciones Unidas en 1975 . En Alemania, Austria, Dinamarca y Suiza la fecha elegida fue el 19 de marzo de 1911 por primera vez donde se conmemoró el «Día Internacional de la Mujer Trabajadora». Allí asistieron millones de mujeres que pidieron por el derecho al voto, al trabajo, a la formación profesional y a la no discriminación laboral.
El sufragio femenino, la reivindicación de la igualdad, la denuncia contra la opresión social, familiar y laboral, la separación entre sexualidad y reproducción, la defensa de la maternidad libre y el derecho a elegir, la libertad sexual, la planificación familiar y los métodos anticonceptivos fueron algunos de los conceptos por los que marcharon y todavía marchan.
Que el 25 de marzo de 1911 fue cuando se dio verdaderamente un quiebre en la historia tanto de las mujeres como del feminismo: 123 jóvenes trabajadoras y 23 trabajadores murieron en el trágico incendio de la fábrica Triangle Shirtwaist en Nueva York. Las puertas de emergencia habían sido cerradas y no pudieron abandonar el edificio. Esto provocó un cambio radical en la legislación laboral del país y fue un impulso clave para la lucha por mejores condiciones laborales.