Spraytec, la fábrica de fertilizantes de capitales globales con planta en Roldán, avanza en un millonario desembolso para aumentar su capacidad de producción en la ciudad para atender el mercado interno. Y no se trata de cualquier salto: pasará de ocupar una hectárea a sumar otras 6 hectáreas y a cuadriplicar su capacidad de producción, que hoy es de 8 millones de litros.

“Nuestra planta está trabajando al 60% de la producción, pero calculamos que en dos o tes años estaremos al 100% y para esa fecha queremos ya tener las nuevas instalaciones listas”, contó el CEO en Argentina de la firma, Mariano Meineri, al portal Rosario3.

Según resaltó, mantendrán la actual planta y los silos en el área industrial de Roldán, pero el nuevo centro productivo se levantará adentro del Parque Industrial de Roldán. “Nos genera más beneficios y esperemos que no nos demoren con las habilitaciones”, razonó. Cuando tengan la nueva planta lista, los productos de mayor circulación se elaborarán allí quedando los de menor rotación en las instalaciones actuales.

“Nuestra planta trabaja 100% para producción interna, y como vemos que la agroindustria argentina va a crecer mucho queremos acompañar esa expansión. Y, de paso, nos preparamos para que cuando cambien las normativas en Argentina que limitan las exportaciones, como la obligación de liquidar a 90 días cuando el mercado nos pone un plazo de 180/240 días para pagar. En algún momento, la situación se tiene que normalizar y vamos a poder salir a exportar”, apostó.

Como esas trabas impiden la realización de exportaciones desde Argentina (lo que apuntalaría el ingreso de los dólares que le escasean al Banco Central), el grupo concentra sus exportaciones desde la base en Brasil (puntualmente, en Maringa). Eso sí, desde Argentina sale buena parte del know how y los técnicos para poner en marcha una planta de Spraytec en Iowa, a las claras un dato que marca que el talento argentino es de exportación.

¿Y cómo hacen con las importaciones? «Un arte. Un partido de ajedrez en el que al final del día hay que tumbar todas las fichas para volver a empezar de nuevo al otro día», ironiza Meineri. El CEO contó que tienen muchos insumos importados, pero que la vuelta se la encontraron comprándolos desde la empresa del grupo en Brasil, que los puede esperar a que ellos consigan los dólares para pagarlos.

Actualmente la firma emplea unas 45 personas, de las cuales unas 15 viven en Roldán, mientras que el resto lo hace en distintas localidades.