El año no pudo haber empezado mejor para el roldanense Ezequiel Barra en lo que hace a su incipiente carrera deportiva, ya que rompió un récord en lanzamiento de jabalina y quebró una marca de más de 35 años. Es un nuevo logro del deportista local, quien ya había dado que hablar durante el 2022 por su crecimiento como atleta. Actualmente, sueña en grande y esta consecución hace crecer sus ambiciones. Tanto, que se ilusiona con llegar a lo más alto.Durante el primer torneo del año, disputado el 18 de febrero en el estadio municipal Jorge Newbery, se adueñó del récord rosarino al lanzar hasta 55,38 metros. “Lo logré en el cuarto lanzamiento con la jabalina más pesada, que es la olímpica de 800 gramos. La marca estaba vigente desde 1987”, contó Ezequiel, con 17 años de edad, a El Roldanense. “Fue algo muy bueno y estoy muy contento, sobre todo porque se ven reflejadas las ayudas de mi familia, de mi entrenador y mi propio sacrificio”, aseguró.“Lo tomo con muchas expectativas y mayor ambición para las próximas competencias, ya sean nacionales como internacionales”, describió. En el año que pasó, sus grandes actuaciones en los Juegos Santafesinos le permitieron clasificar a los Evita desarrollados en Mar del Plata, junto a chicos de todo el país. Fue allí que logró la medalla de oro y se consagró campeón nacional entre 36 participantes. A su llegada a Roldán, fue condecorado en el Concejo de la ciudad.Ezequiel asistió a la escuela primaria en la Fiscal, hoy acude a la secundaria en Funes y tiene como deportista modelo a Braian Toledo, quien supo dejar una huella durante sus años de competencia. “Quiero dedicarme a este deporte. Voy a entrenar para seguir creciendo y ganar experiencia”, contó. Tiene por delante el campeonato provincial y el Nacional, ambos sub 20. De hecho, este último le podría brindar el acceso al Sudamericano de Cali, Colombia.“Es un sacrificio enorme el que realiza”, valoró Mariano, su padre, y añadió que está buscando sponsors para acompañar su crecimiento. “Es un deporte muy caro, por la jabalina, los viajes, las zapatillas, el gimnasio, el kinesiólogo y demás, pero sé lo importante que es acompañarlo”, señaló. Su hijo, mientras, es parte de la selección argentina y se ilusiona con los Juegos Olímpicos. “París 2024 y Los Ángeles 2028 son un gran sueño, una meta que tengo. Para eso hay que seguir entrenando, pero estamos encaminados”, se esperanzó.