La Ciudad

Tocadiscos, una terapia alternativa que se reinventó en tiempos de pandemia

Tiene lugar dentro del espacio de salud mental y adicciones que funciona en el Samco local. Cómo es el dispositivo que utilizan como estímulo.

Un espacio destinado a personas con problemas de salud mental y adicciones funciona en el hospital de la ciudad desde hace poco más de dos años. Liderado por psiquiatras, psicólogos y acompañantes terapéuticos, utiliza una herramienta alternativa para tratar a los pacientes denominada Tocadiscos. En el contexto de pandemia, el grupo debió modificar la forma de sus encuentros. “Tuvimos que invertir las lógicas de un modo veloz, procurando no perder los vínculos ni el espacio grupal”, dice la coordinadora Melina Batalla a El Roldanense.Tocadiscos es un dispositivo que permite compartir emociones con la música como estímulo y disparador. Así lo define Melina: “Es un espacio que nació hace 14 años en Rosario y se fue expandiendo a otras localidades con la consigna de que diferentes personas encuentren bajo el paño de la salud mental un grupo donde resocializar, compartir la palabra, las ideas y tener una contención tanto de profesionales como de pares”. La terapia funciona dentro del hospital, pero también en espacios que se arreglan previamente como plazas u otros efectores de salud. “En Roldán primero se sumaron rápidamente muchas personas con problemas de discapacidad y necesidades de inclusión, así como otros usuarios con problemas complejos de salud mental que encontraron una contención”, explica sobre los casi tres años que pasaron desde que el espacio tiene lugar en Roldán.Sin embargo, la lógica de la pandemia obligó a cambiar los planes y las maneras de los encuentros y seguimientos. “Procuramos mantener esa distancia física que ahora es necesaria. Es así que surgen las visitas cuidadas, los seguimientos telefónicos pautados, la radio como medio al que casi todos pueden acceder sin la necesidad de contar con medios tecnológicos costosos y el boca a boca, que hace que los usuarios sean familiares y vecinos de los participantes”, amplía Batalla.A su vez, señala que no se puede determinar de antemano si una persona recuperada de coronavirus necesita un control sobre su salud mental y las secuelas que pudo haber dejado el virus. “Generalmente, la familia y los usuarios demandan la necesidad de atención y contención, más que de chequeo”, subraya. También, especifica que se están formando nuevos grupos que, en el futuro, se juntarán físicamente para tratar los temas que surjan o aquellos relacionados al contexto actual. Incluso, no descarta que una flexibilidad en los protocolos permita volver a trabajar con grupos reducidos.Tocadiscos es una terapia que lleva su tiempo en la ciudad, aunque debió encontrar la fórmula para reinventarse en estos tiempos. “No olvidemos que esta es la semana de la salud mental y fomentemos en la lógica de tocadiscos el diálogo familiar, la manifestación de nuestras emociones, la información y el esparcimiento dentro de lo posible. No hay salud sin salud mental”, cierra Melina.