Vacaciones de verano: cómo cuidar de nuestra salud al 100%
Llegó el verano y aunque seguimos atravesando la pandemia podemos, con todos los cuidados necesarios, tomarnos unas merecidas vacaciones.
Llegó el verano y aunque seguimos atravesando la pandemia podemos, con todos los cuidados necesarios, tomarnos unas merecidas vacaciones. Puede ser una playa, un bello valle entre montañas, o una ciudad rica en historia y cultura, ¡donde sea para pasar días inolvidables y disfrutar de buenos momentos!
Sin embargo, estar de vacaciones no implica que seamos negligentes con nuestro cuerpo. Nuestra integridad, tanto física como mental, debe estar asegurada, de modo que nadie la pase mal de forma innecesaria en estas semanas que vienen. La salud no es ninguna broma, y debemos tenerla siempre como prioridad, sea lo que sea que hagamos y dónde vayamos.
Considerando que hablamos sobre salud en la temporada de verano, hay ciertos aspectos específicos que debemos tener en cuenta, los cuales nos evitarán molestias muy comunes de estas épocas y que, de cuidarnos apropiadamente, nos ahorrarán dolores y otros inconvenientes más graves.
Si se nos ocurriera referirnos a la mayoría que prepara las maletas, sube a su auto y se va de vacaciones, seguramente se dirijan a las playas más soleadas, cómodas y tranquilas existentes cerca. El verano implica calor, el calor nos invita a las playas, y las playas tienen de protagonista al sol. Nuestra caliente estrella puede que nos provea de un buen bronceado pero, como muchos profesionales de la salud dicen, no es necesariamente saludable.
Además de extremar todos los cuidados, es pertinente conocer el sistema de salud del destino que elijamos para vacacionar. Ingresando a www.clinca-web.com.ar podrás conocer las diferentes instituciones de salud, tanto públicas como privadas de todas las ciudades de Argentina para saber dónde acudir en caso de necesitar asistencia médica durante las vacaciones.
Cómo cuidar nuestra salud en vacaciones de verano
Empecemos con lo esencial, la luz solar: una exposición larga, innecesaria, puede ser muy dañina para cualquiera. Desde quemaduras, envejecimiento de la piel, daños oculares y supresión del sistema nervioso hasta cáncer dérmico. Estar bajo el sol por tiempos extensos puede traernos problemas tanto agudos como crónicos debido a la radiación UV.
Protegernos del sol es fácil y puede ser incluso gratis: no hace falta gastar en cremas que valen oro. Veamos puntos específicos que pueden serte de ayuda.
● Los niños primero: los más jóvenes son los más propensos a desarrollar cáncer de piel debido a una exposición constante al sol. Además de protectores solares, es recomendable alejarlos de la luz solar si es posible, sobre todo si se encuentran en el mar por mucho tiempo, dado que el reflejo del agua rebota sobre los que se hallan en ella.
● Quédate con las cremas bronceadoras: exponerse al sol, incluso con protector, no es nada recomendable. Es considerado mejor un bronceado muy sencillo en camas solares de ser posible. Si buscas vitamina D, ¡no te preocupes!
● Los protectores solares: deben estar siempre disponibles en tu mochila o cartera, hay ocasiones en las que desgraciadamente no puedes alejarte del sol, por lo que cubrirse de crema protectora es mejor que nada. Ten en cuenta siempre el factor de protección solar que puede verse en el envase para saber cuánto necesitas de él. Debe aplicarse cada par de horas y de forma cuidadosa.
● Vestimenta: intenta ir cubierto de ser posible, afortunadamente existen ropas livianas que no dan tanto calor que pueden utilizarse si no queda otra que caminar bajo el sol. Intenta proteger, sobre todo, tu cabeza con alguna gorra o sombrero y tus brazos con remeras de mangas largas.
● Sombra: si vas directo a la playa, plantéate comprar una carpa abierta para tener sombra o una sombrilla. En caso de que te encuentres paseando por una ciudad y el sol esté encima tuyo, camina por las veredas con más árboles o techos de tiendas.
● El agua vale más que el oro: esto es obvio, pero no tanto, ¡hay que hidratarse! Toma mucha agua, fresca pero no helada a fin de mantener tu energía y estar más protegido.
Recuerda que lo esencial es la protección. No olvides tampoco tener tu barbijo o tapa boca a mano, tomar distancia y, preferentemente, estar vacunado contra el COVID-19. ¡Esperamos que estas recomendaciones hayan sido útiles, que puedas aplicarlas para disfrutar de unas lindas vacaciones y poder empezar de la mejor manera el 2022!