Perspectivas

Alimentación preescolar: ¿Una etapa que pasa desapercibida?

‘‘Es una etapa fundamental para la incorporación e instauración de hábitos alimentarios saludables y que serán determinantes en el crecimiento y desarrollo saludables’’, señalaron profesionales.

Por: Abi Blanco y Mariela Gentile (*)

La edad preescolar engloba el periodo desde que el niño adquiere autonomía en la marcha hasta que empieza a asistir regularmente a la escuela. En esta etapa se establecen las preferencias y aversiones alimenticias que estarán condicionadas por las costumbres familiares. Es una época de formación del gusto alimentario, para el que existen condicionantes genéticos, sociales, culturales e intrafamiliares.

¿Qué cambios se suceden a esta edad?

  • En la etapa preescolar se produce una desaceleración del crecimiento. También existe una reducción de las necesidades nutritivas y del apetito. Por lo que en esta etapa puede  interpretarse erróneamente esta falta de apetito como un signo patológico.
  • Inicia la adquisición de los hábitos y costumbres propias de la familia y de la cultura en que vive.
  • A los 3 años ha terminado la erupción dentaria temporal, su desarrollo les permite el uso de cubiertos, beber en vaso y han llegado a la madurez de las funciones digestivas y metabólicas, lo que les permite hacer una dieta variada
  • Presentan un rápido aprendizaje del lenguaje, una maduración de la motricidad fina y gruesa y es una etapa importante de socialización. Inicia la adquisición de los hábitos y costumbres propias de la familia y de la cultura en que vive.
  • A esta edad ya se cuenta con la  capacidad para regular la ingesta de energía a lo largo del día. Es frecuente que haga varias comidas pequeñas a lo largo del día, pudiendo realizar un gran ingreso energético en unas comidas en detrimento de otras, si bien con un consumo calórico global normal. 
  • En cuanto al desarrollo emocional, aumenta la actividad, la autonomía y la curiosidad, se puede volver más selectivo con las comidas, y/o presenta una reacción negativa o de desconfianza a todo lo nuevo (neofobia) incluidos los alimentos. Va desarrollando sus preferencias y clasifica los alimentos entre los que le gustan y los que no le gustan, influido por su aspecto, sabor, textura, olor, color y/o temperatura.

Esta, es una estapa fundamental para la incorporación e instauración de hábitos alimentarios saludables y que serán determinantes en el crecimiento y desarrollo saludables.

Si tenes dudas sobre el crecimiento, desarrollo y nutrición en esta etapa es el momento indicado para hacer consulta con el especialista en nutrcion y creciemiento infantil. 

(*) Abi Blanco es Médica Pediatra. Mat: 22004 reg.esp: 42/1505 y Mariela Gentile es Licenciada en Nutrición (mat.507)desarrollan su labor de lunes a viernes en CTR rehabilitación integral .Aquellos interesados pueden contactarse  al centro transdiciplinario mediante sus redes sociales:

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