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Alma de campo y espíritu de diseño: restauraron una vieja casa sobre A012 y la transformaron en un nuevo espacio de eventos

Casa Quinoto combina una estética rústico industrial con mucho espacio verde, y rompe con los sitios tradicionales de celebración. Es un hogar antiguo que trae una propuesta novedosa y diferente.

En una línea imaginaria de tiempo, es necesario viajar un año hacia atrás para descubrir el comienzo de la historia. Iván Scorza y Carolina Valdés, quienes tienen más de una década de experiencia en diseño y ambientación de eventos, compraron una casa antigua que estaba casi en ruinas sobre la ruta A012. Lejos de pensar en derribarla o modernizarla, la restauraron desde cero y potenciaron su carácter original. Así nació Casa Quinoto, un nuevo espacio para celebración de eventos en Roldán, con estética rústico industrial y mucho espacio verde.

Por fuera de los formatos tradicionales, el espacio no es un salón genérico, tampoco una simple casa de alquiler, sino un hogar antiguo que trae consigo una propuesta novedosa y diferente. En estos meses de trabajo, los propietarios se encargaron de respetar la esencia del hogar, con la idea de renovarla manteniendo los secretos que la construcción tuvo en su génesis. Ahora, los ambientes combinan techos con vigas a la vista, pisos calcáreos, aberturas con vidrios repartidos y una galería con un patio de luz central.

“Queríamos crear un lugar donde nosotros también elegiríamos celebrar. Un espacio que hable de lo que somos, con nuestra estética, ideas y nuestra pasión por los detalles”, contaron a dúo a El Roldanense. Junto a las obras que se hicieron en el interior, se destaca el entorno verde y natural del lugar. El parque mezcla árboles añosos, palmeras, quincho, parrilleros, fogoneros y un ambiente ideal para festejos al aire libre. “Cada rincón fue pensado para transmitir una sensación: tranquilidad, calidez, conexión con la naturaleza y armonía visual”, dijeron.

Casa Quinoto puede recibir todo tipo de eventos, desde bodas hasta cumpleaños, pasando por eventos empresariales, reuniones corporativas y bar mitzvá, hasta degustaciones gastronómicas o capacitaciones. “Representa no solo un nuevo espacio para celebrar, sino también una forma de entender los eventos como experiencias estéticas, emocionales y auténticas. Un destino cercano, con alma de campo y espíritu de diseño, que promete convertirse en un nuevo referente en la zona”, aseguraron ambos titulares.

Esta antigua casa de campo se transformó en el primer espacio propio para celebraciones de Carolina e Iván, quienes en 2015 dieron vida a Decopallet, una marca especializada en creación de ambientes a través de mobiliario para eventos. De esa forma, el nuevo sitio por el que apostaron es un espacio con personalidad propia y una impronta única, pensado para que cada evento tenga su estilo. “No es para todo el mundo, y eso también está bien. Tiene una onda muy marcada, con identidad, y hay personas que valoran justamente eso”, señalaron.

El próximo jueves 27 de noviembre se realizará la inauguración de la casa, que a la vez representa una continuidad en el camino que ambos empezaron a recorrer hace 10 años. El cuidado por la estética y la calidad de cada montaje es su sello distintivo, algo que trasladaron a la Casa Quinoto para ofrecer una nueva experiencia desde su arquitectura hasta la inmensidad de su entorno verde. Tras un año de trabajo, el proceso de reciclado culminó y es momento de darle vida a un proyecto disruptivo e innovador en la ciudad.