La Casa Amsler, situada en la esquina de San Martín y Urquiza, es uno de los sitios icónicos de la ciudad. Tuvo su época de esplendor allá por mediados del siglo pasado y hasta la década de los ‘70, aunque con el tiempo sus instalaciones entraron en decadencia y el edificio se ha anquilosado. Ahora mismo, con la demolición aprobada por el Concejo en 2019, sobrevuela un proyecto para construir allí un nuevo polo comercial, con galería de negocios.

Si bien un grupo empresario de Rosario estuvo sondeando el lugar y transmitió a sus dueños sus intenciones, la idea aún es incipiente, ya que el derribo de la casa no tiene fecha.

La ordenanza de demolición que ya cuenta con el ok de los ediles especifica que, según los ingenieros Roberto Bernardi y Marilina Ramírez, de la Secretaria de Planeamiento de la Municipalidad, se advierte el equilibrio inestable del inmueble, por lo que se recomendó “su vallado, apuntalado y posterior demolición”. Incluso, la propia familia Amsler avala la necesidad de que se lleve a cabo por cuestiones de seguridad.

Tiempo atrás, solo se cumplió con la primera parte de lo que cuenta la ordenanza, ya que el antiguo edificio puede verse hoy vallado.

Del mismo modo, el escrito anuncia que un acta acuerdo firmado por los propietarios y la Municipalidad servirá como compromiso para la preservación y conservación de una parte del lugar. Actualmente, si bien hay distintas ideas de proyectos en torno a cuál será el futuro de una esquina histórica para la ciudad, los dueños no han consensuado cuál es la propuesta adecuada para llevar a cabo.