Un dispenser de agua comunitario: el nuevo producto made in Roldán
Empresa de origen neozelandés con planta en la ciudad anunció novedades para el 2017, algunas de las cuales causan asombro por su magnitud.
Tras más de 20 años de trayectoria, Duraplas –fábrica de plásticos para el agro y la industria con sede en Roldán– anunció para el año que comienza una serie de inversiones en nuevos productos con tecnología aplicada para abordar diferentes rubros y áreas de negocio.
Entre las novedades anunciadas para 2017 se destaca el lanzamiento de dispensers comunitarios de agua potable que, con 23 mil litros capacidad, permiten a sus usuarios “adquirir su propia agua segura en zonas comerciales, libre de carga orgánica, agentes patógenos, pesticidas, olores, colores, sabores, sales minerales o metales contaminantes”, tal como apunta el portal Punto Biz.
El mismo medio especializado señala que Duraplas también encara un importante desarrollo en tapas de tanques para posibilitar reservorios de mayor resistencia, calidad y durabilidad. El actual vocero de la firma, Pablo Olano, ratificó el crecimiento sostenido que se viene implementando en materia de innovación y desarrollo, a pesar de las fluctuaciones económicas.
Con origen neozelandés y afiliada a compañías de diversos países –Nueva Zelanda, Australia, Francia, Inglaterra y Estados Unidos– la planta de Duraplas se ubica en el kilómetro 47,5 de la Ruta A012, frente al parque industrial Jorge Luis Oldani.