Historia y proyectos de un establecimiento que es emblema de la ciudad
El vivero Banci comenzó a funcionar hace 60 años y ya pasó por cuatro generaciones. Prepara importantes novedades.
Cuando en 1955 la familia Banci fundó su vivero, quizás no imaginaba que sesenta años más tarde el negocio seguiría su camino, habiendo ya pasado por la administración de cuatro generaciones. Pero lo cierto es que tal es el rumbo que tomó una rica historia que todavía tiene capítulos reservados para el futuro: en el corto plazo se vienen importantes novedades en el que sin dudas es uno de los negocios más emblemáticos con que cuenta la ciudad.
¿Cuáles son esos proyectos que asoman en el horizonte? Quizás el más impactante de ellos tiene que ver con la intención de convertir al tradicional establecimiento en uno de los más importantes centros de distribución de macetas con que contará la región.
“Estamos trayendo una enorme cantidad de productos de Córdoba y de Buenos Aires. Para que la gente se de una idea, están llegando cinco chasis de acoplados llenos de macetas, en todas las variedades que puedan encontrarse”, contó en diálogo con El Roldanense Andrés Banci, actual titular, junto a sus padres Raúl y Alicia, del comercio ubicado sobre Ruta 9 en el kilómetro 325,5.
“Ello implicará una renovación total de nuestra estructura, que ya comenzó el año pasado con la apertura de un local de accesorios para jardín que montamos en el mismo vivero”, completó el viverista.
Pero las novedades no se detienen allí: con el objetivo de acercar sus productos y experiencia al casco urbano, los propietarios del negocio planean también desembarcar con una sucursal en el centro de la ciudad.
Claro que semejantes apuestas se sustentan en un recorrido de décadas que brinda la base necesaria para animarse a cualquier desafío que tenga que ver con el maravilloso mundo de las plantas. Es que desde sus comienzos el vivero Banci se posicionó como un faro del rubro, llegando a contar con un campo de cultivo de 70 hectáreas.
“Desde siempre nos destacamos no sólo por la venta de plantas, sino también por nuestra vocación de asesoramiento y la capacidad que hemos desarrollado en materia de paisajismo, servicios de jardinería, parquización y reparto a domicilio”, puntualizó Andrés Banci a la hora de explicar los fuertes de una compañía de pura cepa roldanense, la cual exhibe un pasado tan importante como el futuro al cual busca proyectarse.
Las rosas de Vanino
El vivero habrá dejado a sus propietarios un sinnúmero de anécdotas y recuerdos relacionados a la actividad. Pero a la hora de elegir uno, Andrés Banci no duda en mencionar a su abuelo Vanino. Se trata de un hombre que en su tiempo no sólo se dio a conocer por llevar, con esfuerzo y pasión, las riendas del negocio familiar: entre otros hitos, también adquirió fama de corte nacional e internacional por los injertos de rosa que supo desarrollar. Varias de las nuevas variedades a que dio lugar llegaron incluso a obtener la correspondiente certificación oficial.