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Sportsman proyecta en grande, mientras sueña con el retorno de su primera división

El club encaró una serie de reformas que continúan en estos días para recibir el ok de la liga Cañadense. Mientras, lleva adelante obras edilicias en su predio y el de TDS 1.

El 2022 de Sportsman se vio marcado por un gran sueño cuya concreción está cada día más cerca de hacerse realidad. Se trata de la formación de la primera división masculina de fútbol y su reserva, un proyecto que crece acompañado de una serie de reformas en el club. Si bien la Cebra aún no recibió el ok de las autoridades de la liga Cañadense, esto podría ocurrir pronto para empezar a competir en marzo. En diálogo con El Roldanense, el presidente Amin Bazze hizo un balance del pasado reciente.“El club ha crecido mucho en cantidad de chicos y se han hecho muchas obras importantes. El balance general es positivo”, expresó al comienzo de la charla. “Se están terminando los vestuarios con 12 duchas de agua fría y caliente, se hizo el vestuario de árbitros, se agrandó la utilería y se corrió el tapial para alambrar nuevamente la cancha”, describió, y destacó las nuevas veredas que se realizaron mediante un convenio con la municipalidad, con cinco rampas para facilitar el acceso de personas discapacitadas.La iniciativa de volver a tener fútbol grande en la ciudad representa, en palabras de Bazze, un crecimiento que implica cambios. “En lo que respecta a la parte humana, siempre es difícil llevar adelante una institución con tanta gente, pero el análisis es muy bueno”, aseveró. “Poder concretar la formación de la primera y la reserva después de más de 40 años, con un lapso que hubo en el ‘86 y ‘87, es algo que la ciudad necesita”, precisó.Se espera que, en los próximos días, el mandamás de la competencia se haga presente en la institución para observar el avance de las obras que le fueron solicitadas. Muchas de ellas ya fueron realizadas, en tanto que otras se están llevando a cabo actualmente. “Esto representa una alegría para la gente, que el domingo podría ir a la cancha independientemente del club que sea. Siendo una ciudad muy grande, todavía no tenemos un club que tenga Primera”, manifestó el presidente.“Nosotros fuimos pioneros con el femenino, y ahora vamos por los chicos. Más allá de que lo hacemos con cuerpos técnicos y personas del club, se ha sumado mucha gente a trabajar y a darnos una mano económicamente”, describió. Por ese lado, muchos chicos se presentaron a la convocatoria que lanzó el club para el armado de los planteles y ya están entrenando. “Somos optimistas. La idea no es contratar a alguien, sino que ellos jueguen por la camiseta. Queremos empezar de forma humilde, como corresponde”, argumentó.Si bien se trata de un proyecto con el que sueña toda la comisión blanquinegra, Bazze señala que “este salto es difícil” y que el objetivo es que no resienta ninguna de las bases sólidas de la estructura del club. “No todos los chicos que ingresen a la categoría promo van a llegar necesariamente a la primera división. Van a tener la meta y aspiración de hacerlo algún día, aunque siempre vale más el camino que recorren”, expresó. En paralelo, afirmó que muchos de ellos juegan y no compiten en edades tempranas, tal es la idea del club en categorías infantiles.De la mano con este ideal, hay otros proyectos para el 2023 que ya se están diseñando, a la espera de la aprobación de la comitiva del club. Uno de ellos es la transformación de las tres canchas del predio de TDS 1 en una de tamaño grande. El otro, aprovechar el espacio que quedó disponible donde estaba la casa, en la sede de la entidad. “Ya cerramos esa esquina y va a haber alguna reforma. Trataremos de hacerlo para que la gente pueda tomar algo, pasar un rato y quedarse en el club”, aventuró.